La Heterogeneidad Neurobiológica de la Depresión (Sesión Bibliográfica SUCEDE)
La premisa de la sesión es que la Depresión Mayor no es una enfermedad uniforme. Sus síntomas son sumamente heterogéneos, abarcando categorías emocionales (tristeza, culpa), de ansiedad (rumiación, irritabilidad) y somáticas (alteraciones de apetito, sueño y energía). Esta variedad sintomática sugiere que diferentes mecanismos cerebrales y vías fisiopatológicas pueden estar en juego en distintos pacientes.
La presentación y el debate subsiguiente habrían girado en torno a las principales hipótesis que intentan explicar la etiología de la DM, y cómo la investigación actual las está redefiniendo a través de la lente de la heterogeneidad:
- El Eje HPA y el Estrés (Hipercortisolemia)
Un punto central fue la desregulación del Eje Hipotalámico-Pituitario-Adrenal (HPA), el sistema de respuesta al estrés del cuerpo.
Cerca del 50% de los individuos con DM muestran hipercortisolemia.
Esta desregulación es un factor neuroendocrino clave en la etiología de la DM.
La hiperactividad de las neuronas de la hormona liberadora de corticotropina (CRH) puede estar particularmente asociada con la forma más grave, la depresión melancólica. - Las Hipótesis Clásicas (Monoaminas y Neurotrofinas)
Hipótesis Monoaminérgica: El modelo predominante postula que la DM se origina por una menor disponibilidad de monoaminas (serotonina y noradrenalina) en el cerebro.
Hipótesis Neurotrófica: Esta teoría propone que la DM se debe a la atrofia neuronal causada por la baja expresión del factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF). El BDNF es crucial para la neuroplasticidad y la resistencia celular. - Hallazgos de Neuroimagen y Redes Neuronales
La neuroimagen ofrece evidencia de cambios estructurales y funcionales que varían entre pacientes, reforzando el concepto de heterogeneidad.
Una observación consistente es la reducción del volumen del hipocampo, una estructura vital para la memoria y la regulación emocional.
También se ha observado una actividad incrementada en la amígdala y la corteza prefrontal en pacientes deprimidos.
La discusión en grupo se centraron en las implicaciones clínicas de esta heterogeneidad, con los siguientes puntos destacados:
Subtipos Neurobiológicos: La clave está en pasar de un diagnóstico puramente sintomático a uno que incorpore los biomarcadores. Se debatió cómo la presencia de ciertas alteraciones (como la hipercortisolemia o procesos inflamatorios) podría diferenciar subtipos de depresión, como la melancólica o la atípica, llevando a tratamientos más precisos.
Estrategias de Investigación: La complejidad exige enfoques que analicen la interacción de factores genéticos y ambientales. Se enfatizó la necesidad de seguir investigando cómo los polimorfismos genéticos interactúan con el estrés y otros factores de riesgo para conferir vulnerabilidad a la depresión.
Medicina de Precisión en Psiquiatría: El consenso final probablemente subrayó que la comprensión de la heterogeneidad neurobiológica es el camino hacia la medicina de precisión en psiquiatría. Solo al identificar los sustratos cerebrales específicos en cada paciente, se podrán elegir tratamientos farmacológicos o terapias de neuromodulación con la máxima eficacia, superando el enfoque de «talla única» de los tratamientos actuales.